‘Dorothy Draper fue a la decoración lo que Chanel a la moda: un genio. Sin ella no existiría el negocio profesional de la decoración’ .Carleton
Varney.
Dorothy Draper creó el estilo barroco americano, también conocido como el ‘Draper Touch’. Un estilo teatral y ecléctico, dramático, contundente y antiminimal. Un cóctel explosivo de rococó, neoclasicismo, art decó, color y exceso. Al grito de ‘the drab age is over’ introdujo una bocanada de aire fresco al oscuro y monótono estilo victoriano de la época.
Antítesis de la escuela Bauhaus; fue y es considerado como un estilo de mal gusto, tanto que hasta Frank Lloyd Wright la tildó de ‘profanadora inferior’.
Dorothy Draper (1889-1969)
nació en el seno de una familia aristocrática y creció en Tuxedo Park, una de
las comunidades más exclusivas del estado de NY, rodeada de la flor y nata de
la upper-class americana que vivía al
más puro estilo WASP.
Decoradora autodidacta,
empezó su negoció decorando su propia casa – que después vendería
completamente amueblada- lo que despertó tal entusiasmo entre sus amigos de la high society que empezaron a pedirle que
decorara también las suyas. En 1925 fundó en Manhattan el Architectural Clearing House, el primer
negocio de diseño de interiores en EEUU y a partir de 1930, coincidiendo con la
petición de divorcio de su marido, dedicó todas su fuerzas al negocio y empezó a subir como la espuma.
En 1940, mientras se libraba la II GM, Draper se convertía en una afamada trendsetter. La gente acudía a ella por
su especialidad en hacer lo inesperado y por su particular y brillante manejo
del color. Fue una de las primeras en creer que los colores vívidos y
bellos ayudaban a la gente a sentirse más feliz.
Varney
cuenta que ‘Dorothy era poderosa,
derrochaba glamour, con su cara de estrella de cine, vistiendo largas capas y
guantes blancos. Sólo se preocupaba por
lo que ella pensaba y siempre decía’:
Los siete elementos del Draperismo
1. Colores Intensos: Esquemas
de color, brillantes y exuberantes: berenjena y rosa con un toque de azul
turquesa; verde y rojo con coral y contrastes extremos como negro y blanco con acentos
de color. Incorpora baldosas B&W en suelos.
2. Plantas naturales: ‘ Las plantas y flores son tan obligatorias en
el esquema decorativo como unas hermosas cortinas’.
3. Alfombras:
con texturas densas, gruesas
y táctiles, de colores neutros para que no compitan con otros elementos y den
confortabilidad al ambiente.
4. Detalles sorprendentes y oversize: molduras
ornamentales, volutas rococó y yeserías barrocas en paredes y techos.
5. Espejos: Numerosos espejos, grandes y barrocos. ‘Mirrors
have come to mean much more than the original ‘looking glass.’… By using them,
there are no dark, gloomy corners, no drab caverns for halls. There can be a
feeling of freedom, light, air, space.'
6. Chimeneas: ‘Una chimenea es el corazón de cualquier habitación y debe estar a punto para ser encendida a la mínima provocación’.
7. Patterns exuberantes: Enormes estampados que visten paredes enteras, combinaciones imposibles de rayas con grandes flores y flecos.
Su obra
New York City’s Hampshire House en
el sur de Central Park. Sutton Place NYC – a principios de los 60 fue contratada
por el arquitecto Douglas Elliman para revitalizar una zona en la que nadie
quería vivir. DD convirtió Sutton Place en uno de los barrios más elegantes de
Manhattan pintando todos los edificios de negro con adornos en blanco,
añadiendo color a las puertas como en Dublín.
Met Restaurant - Metropolitan
Museum of Art. Lobby del hotel Carlyle en Madison Avenue. The Greenbrier Hotel (Virginia), por cuya intervención consiguió
los honorarios más altos jamás pagados a un decorador. Camilla Restaurant en
el Hotel Drake (Chicago). Hoteles
Fairmont y Mark Hopkins (San Francisco).
Autora de 2 grandes best sellers: "Decorating is Fun:
How to be your own decorator" y "Entertaining is Fun. How to be a popular hostess".
Creó un curso por correspondencia llamado "Learn to Live" con el que prometía a la clase media norteamericana convertir "su cansada y aburrida vida, en un milagro de encanto, glamour y emoción." Casi nada!
Creó un curso por correspondencia llamado "Learn to Live" con el que prometía a la clase media norteamericana convertir "su cansada y aburrida vida, en un milagro de encanto, glamour y emoción." Casi nada!
Fuentes:
http://blogs.artinfo.com/